Oración para altas horas de la madrugada

Moncho Otero

Fray Escoba,
San Junípero siervo,
bárreme lo malo,
déjame lo bueno.
Quise como tú, juntar
al ratón y al gato,
al gato y al perro
(unos me arañaron
otros me mordieron).
Anda Fray Escoba,
Santísimo Negro,
bárreme lo malo,
déjame lo bueno.

Y tú, Jesús militante,
mártir compañero,
bárreme lo malo,
déjame lo bueno.
Tú puedes, poeta Nazareno,
sepárame la víbora del heno
y junta nuestras manos
así como tú y yo
juntamos nuestros versos.
Amen.

En la Primavera,
en la Primavera
después de tu invierno,
después de tu invierno,
a los treinta y tres tú diste tu vida,
por barrer lo malo
por dejar lo bueno.
Eras de los pobres,
eras un obrero
eras un muchacho
Jesús Carpintero.
Líbranos de todo,
tú blanco,
– Junípero negro –
los dos, dos muchachos
sin odio, sin sexo
disteis todo, todo,
porque nos salvemos
porque no nos maten
– igual que a vosotros -,
porque no matemos.