Sale caro ser poeta
Sale caro, señores, ser poeta.
La gente va y se acuesta tan tranquila,
que después del trabajo llega el sueño.
Trabajo como esclavo llego a casa,
me siento ante la mesa sin cocina,
me pongo a meditar lo que sucede.
La duda me acribilla todo espanta;
comienzo a ser comida por las sombras.
Y las horas se me pasan sin bostezo,
el dormir se me asusta se me huye,
escribiendo me da la madrugada,
escribiendo me da la madrugada.
Y luego los amigos me organizan recitales,
a los que acudo y leo como tonta,
la gente no sabe de esto nada:
que me dejo la linfa en lo que escribo,
me caigo de la rama de la rima,
asalto las trincheras de la angustia,
me nombran su héroe los fantasmas,
me cuesta respirar cuando termino.
Y las horas se me pasan sin bostezo,
el dormir se me asusta se me huye,
escribiendo me da la madrugada,
escribiendo me da la madrugada.
Y las horas se me pasan sin bostezo,
el dormir se me asusta se me huye,
escribiendo me da la madrugada.
Sale caro, señores, ser poeta.
Sale caro, señores, ser poeta.
Sale caro, señores, ser poeta.
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Letra transcrita desde audio. La puntuación y ortografía son aproximadas. La musicalización es similar cambiando tan solo una expresión en el tercer verso «llega el sueño» por «da buen sueño», y algunos principios de versos en los que se añade una conjunción enfática «y», además de las repeticiones del verso «escribiendo me da la madrugada» y «sale caro ser poeta» que no están en el poema original.