El hombre acecha (canción primera) – Román LC
Se ha retirado el campo al ver abalanzarse
crispadamente al hombre.
¡Qué abismo entre el olivo
y el hombre se descubre!
El animal que canta: el animal que puede
llorar y echar raíces, rememoró sus garras.
Garras que revestía de suavidad y flores,
pero que, al fin, desnuda en toda su crueldad.
Crepitan en mis manos.
Aparta de ellas, hijo.
Estoy dispuesto a hundirlas, sobre tu carne leve.
He regresado al tigre.
Aparta, o te destrozo.
Hoy el amor es muerte,
y el hombre acecha al hombre.
(Transcripción propia a partir del poema y del audio de la canción, a falta de fuente escrita; la puntuación y ortografía son estimadas).
Esta canción supone una musicalización de los versos del poema, sin aportar ninguna variación.