Life vest under your seat

Moncho Otero

Señores pasajeros, buenas tardes

y Nueva York al fondo todavía,

delicadas las torres de Manhattan

con la luz sumergida de una muchacha triste,

buenas tardes, señores pasajeros,

mantendremos en vuelo doce mil pies de altura,

altos como su cuerpo en el pasillo

de la Universidad, una pregunta,

podría repetirme el título del libro,

cumpliendo normas internacionales,

las cuatro ventanillas de emergencia,

pero habrá que cenar, tal vez alguna copa,

casi vivir sin vínculo y sin límites,

modos de ver la noche y estar en los cristales

del alba, regresando,

y muchas otras noches regresando

bajo edificios de temblor acuático,

a una velocidad de novecientos

kilómetros, te dije

que nunca resistí las despedidas,

al aeropuerto no,

prefiero tu recuerdo por mi casa,

apoyado en el piano del Bar Andalucía,

bajo el cielo violeta

de los amaneceres en Manhattan,

igual que dos desnudos en penumbra

con Nueva York al fondo, todavía

al aeropuerto no,

rogamos hagan uso

del cinturón, no fumen

hasta que despeguemos,

cuiden que estén derechos los respaldos,

me tienes que llamar,

cuiden que estén derechos los respaldos,

me tienes que llamar,

cuiden que estén derechos los respaldos,

me tienes que llamar, de sus asientos.

 

(Transcripción propia a partir del audio; a falta de fuente escrita, la puntualización y ortografía son estimadas)

Intérprete

Nacionalidad: España

Detalles discográficos

Tipo: Álbum
Año: 2003
Discográfica: Factoría Autor

Comentarios

Se musicaliza el poema prácticamente idéntico, excepto que se repiten algunos versos.

Escucha la canción