Su nombre era el de todas las mujeres

Loquillo

Era una criatura detestable

en el plano moral, un ser abyecto,

una abominación lovecraftiana.

No era tampoco guapa, ni atractiva,

ni graciosa, ni joven, ni simpática.

Era un montón perverso de basura.

Pero fuiste tan imbécil que por ella

dejaste a la que amabas y vendiste

tu alma en los bazares de la noche.

Los bazares de la noche.

Tu alma en los bazares de la noche.

 

Era todo tan triste y tan absurdo.

No vivías apenas. Te colgabas

de la pared de la melancolía

y veías pasar las lentas horas

que hacia nada conducen y hacia nunca.

Las mujeres te habían retirado

su protección, los dioses su asistencia

y la literatura su cobijo.

Fueron tiempos difíciles aquellos.

Fueron tiempos difíciles.

Fueron tiempos difíciles aquellos.

 

La olvidé. Por completo. Para siempre

(o eso creía entonces). Me cruzaba

con ella por la calle y no era ella

quien se paraba en un escaparate

de ropa deportiva, no era ella

quien compraba el periódico en un quiosco

y se perdía entre la muchedumbre.

Como si hubiera muerto. No era ella.

Su nombre era el de todas las mujeres.

Todas las mujeres.

Su nombre era el de todas las mujeres.

 

Su nombre era el de todas las mujeres.

Todas las mujeres.

Su nombre era el de todas las mujeres. [Estrofa x 2]

 

(Transcripción propia a partir del audio y en contraste con el poema original; a falta de fuente escrita, la puntuación y ortografía son estimadas)

Género

Rock

Intérprete

Nacionalidad: España

Detalles discográficos

Tipo: Álbum
Año: 2011
Discográfica: Dro

Comentarios

Loquillo construye su canción fusionando los tres poemas de Luis Alberto de Cuenca, de modo que cada poema constituye una estrofa de la letra. La musicalización es similar, excepto porque repite algunos versos y hay alguna alteración léxica mínima.

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