La huelga
Extraña era la fábrica inactiva
un silencio en la planta,
una distancia
entre máquina y hombre,
como un hilo
cortado entre planetas, un vacío
de las manos del hombre
que consumen
el tempo construyendo
y las desnudas
estancias sin trabajo
y sin sonido.
Cuando el hombre dejó
las madrigueras
de la turbina, cuando desprendió
los brazos de la hoguera
y decayeron
las entrañas del horno,
cuando sacó los ojos
de la rueda y la luz vertiginosa
se detuvo en su círculo invisible
de todos los poderes poderosos,
de los círculos puros de potencia,
de la energía sobrecogedora,
quedó un montón de inútiles aceros
y en las salas sin hombres,
el aire viudo,
el solitario aroma del aceite.
Nada existía sin aquel
fragmento golpeado,
sin el hombre de ropa desgarrada,
sin Ramírez, sin Antonio,
sin Patiño, sin Suárez.
Nada existía,
Sin aquel fragmento golpeado,
Sin el hombre de ropa desgarrada,
Sin el hombre
Sin el hombre.
[Se advierten algunas palabras y murmullos no identificables]
(Transcripción propia a partir del audio; a falta de fuente escrita, la puntuación y ortografía son estimadas)
Poema relacionado
Comentarios
La canción toma el título del poema, y comparte con el mismo la temática de la huelga.
Esta canción también se puede encontrar en La palabra más tuya cantando a Pablo Neruda, un CD de Iberautor Promociones Culturales (2006).