No te tardes, que me muero – Amancio Prada
No te tardes que me muero,
carcelero,
no te tardes que me muero.
Apresura tu venida
porque no pierda la vida,
que la fe no está perdida,
carcelero,
no te tardes que me muero.
Bien sabes que la tardanza
trae gran desconfianza;
ven y cumple mi esperanza,
carcelero,
no te tardes que me muero.
La llave para soltarme
ha de ser galardonarme,
proponiendo no olvidarme.
Carcelero,
no te tardes que me muero.
Sácame desta cadena,
que recibo muy gran pena,
pues tu tardar me condena.
Carcelero,
no te tardes que me muero.
Y siempre cuanto vivieres
haré lo que tú quisieres
si merced hacerme quieres.
Carcelero,
no te tardes que me muero.
Adaptación conservadora a nivel textual que coloca las estrofas en el orden 1, 2 , 5 y cabo. Se retoma en los ábumes Trovadores, místicos y románticos (Ariola, 1990) y en Del amor que quita el sueño (Musicamaina, 2010).
En el álbum hay otras piezas de la lírica castellana medieval y temprano-moderna.