Para Tomasa Figueredo – José Martí
No sé qué tienen las flores,
lindísima bayamesa,
que unas se secan muy pronto;
que hay otras que no se secan.
De blancas flores un ramo
ayer me diste en tu casa,
y hoy las fui a ver, niña mía,
y las encontré más blancas.
Así como el alma en pena,
como un clavel amarillo,
besa tu mano y el alma
se pone color de lirio.
El poema original fue escrito por José Martí en la parte posterior de un retrato de sí mismo que él regaló a Tomasa Figueredo (Obras completas (Tomo 17), página 210). Se fecha del 7 de diciembre de 1892 en Cayo Hueso, Florida, EE.UU.