Romance de la luna, luna
Huye luna, luna, luna.
Huye luna, luna, luna.
Huye luna, luna, luna.
Huye luna, luna, luna.
Huye luna, luna, luna,
con su polisón de nardos.
El niño la mira mira.
El niño la está mirando.
En el aire conmovido,
en el aire conmovido
mueve la luna sus brazos
y enseña, lúbrica y pura,
sus senos de duro estaño.
Huye luna, luna, luna.
Si vinieran los gitanos,
harían con tu corazón
collares y anillos blancos.
Huye luna, luna, luna.
Huye luna, luna, luna.
Huye luna, luna, luna.
Huye luna, luna, luna.
Niño, déjame que baile.
Niño, déjame que baile.
Cuando vengan los gitanos,
te encontrarán sobre el yunque
con los ojitos entornados.
Por el olivar venían,
bronce y sueño, los gitanos.
Las cabezas levantadas
y los ojitos entornados.
Dentro de la fragua lloran,
dentro de la fragua lloran,
dando gritos, los gitanos.
El aire la vela, vela.
el aire la está velando.
Huye luna, luna, luna.
Huye luna, luna, luna.
Huye luna, luna, luna.
Huye luna, luna, luna.
(Transcripción propia a partir del audio, a falta de buena fuente escrita; la puntuación y ortografía son estimadas).
Género
FlamencoDetalles discográficos
Poema relacionado
Comentarios
Hubo varias musicalizaciones anteriores a 1975, por eso no recogidas en esta base de datos: Gabriela Ortega (Federico García Lorca, 1958), Pepe Albaicín, “Romance de la luna, luna” (Cante gitano por Pepe Albaicín, vol. II, 1963), Paco Ibáñez (España de hoy y de siempre, 1964) y Nati Mistral (La maravillosa Natu Mistral, 1972).
La principal variación con respecto al poema de Lorca radica en la omisión de versos (17-23, 28-31), la repetición de otros y la creación de una estrofa mediante la repetición del verso 9 cuatro veces.