De cómo todas las cosas del mundo son vanidat, sino amar a Dios (Libro de buen amor) – Juan Ruiz

De cómo todas las cosas del mundo son vanidat, sino amar a Dios (Libro de buen amor) – Juan Ruiz

Título
De cómo todas las cosas del mundo son vanidat, sino amar a Dios
Autor
Juan Ruiz (Arcipreste de Hita). VIAF
Nacionalidad
España
Nacimiento

Si no se conoce la fecha exacta, se ofrece el primer año del rango posible, o bien 0000 (desconocido).
Fallecimiento

Si no se conoce la fecha exacta, se ofrece el primer año del rango posible, o bien 0000 (desconocido).
Poemario
Libro de buen amor
Género poético
Mester de clerecía
Publicación/Edición original
--
Edición utilizada
2000 - Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes
Año de publicación original
1330
Lugar de publicación original
--
Movimiento
Edad Media
Temas
Amor y Naturalismo amoroso
Texto (poema)

Como dise Salomón, e dise la verdat,
que las cosas del mundo todas son vanidat,
todas son pasaderas, vanse con la edat;
salvo amor de Dios, todas son liviandat.

 

Et yo desque vi la dueña partida e mudada,
dixe: «Querer do non me quieren, faría una nada:
»responder do non me llaman, es vanidat probada.»
Partime de su pleyto, pues de mí es redrada.

 

Sabe Dios, que aquesta dueña e quantas yo vi,
siempre quise guardarlas, et siempre las serví,
si servir non las pude, nunca las deserví,
de dueña mesurada siempre bien escrebí.

 

Mucho sería villano e torpe pajés,
si de la mujer noble dixiese cosa refés;
ca en muger loçana, fermosa e cortés
todo bien del mundo e todo plaser es.

 

Si Dios, quando formó el ome entendiera
que era mala cosa la mujer, non la diera
al ome por compañera, nin d’él non la fesiera,
si para bien non fuera, tan noble non saliera.

 

Si omen a la mujer non la quisiese bien,
non ternía tantos presos el amor quantos tien’,
por santo nin santa que seya, non sé quién,
non codiçie compaña, si solo se mantien’.

 

Una fabla lo dise, que vos digo agora:
que una ave sola nin bien canta, nin bien llora,
el mástel sin la vela non puede estar toda hora,
nin las verças non se crían tan bien sin la noria.

 

Et yo como estava solo sin compañía,
codiçiaba tener lo que otro para sí tenía,
puse el ojo en otra non santa, más sentía,
yo cruisiava por ella, otro la avíe valdía.

 

Et porque yo non podía con ella ansí fablar,
puse por mí mensagero, coydando recabdar
a un mi compañero, sópome el clavo echar,
él comió la vianda, e a mí fiso rumiar.

 

Fis’ con el grand pesar esta trova cazurra,
la dueña que la oyere, por ella non me aburra,
ca debríen me desir neçio, et más que bestia burra,
si de tan grand escarnio yo non trovase burla.

Comentarios

Cuadernas 105-114 del LIbro de buen amor.



Suscríbete a nuestro boletín informativo